lunes, 18 de julio de 2011

LAS EMOCIONES Y EL CORAZON. VERDADES Y MENTIRAS



A menudo hemos escuchado; “…es una persona de corazón” “en el fondo tiene buen corazón” “hacerlo con el corazón” Y todos creemos entender lo que pretende significar… Y si no lo tuviéramos tan claro? Ya que visto lo visto. Y es que a veces conviene preguntarnos si sabemos de verdad lo que creemos saber. Y si necesitaramos darnos cuenta de, con que variabilidad los significados se mudan y las cosas acaban siendo y diciendo algo bien diferente. Si, os invito a reflexionar, a profundizar sobre el significado y las implicaciones de; “to be” corazón.

Una primera cuestión clarificadora que me parece necesaria afrontar es sobre lo que el corazón simboliza. En un intento de concisión y síntesis, dire que el corazón fue creado como depositario de virtudes y cualidades como la franqueza, la autenticidad, la alegría, la fuerza y el valor, la noble intención… pero sobre todo y como mas frecuencia el corazon resulta ser la fuente del amor. El amor es representado a menudo con un corazón. Y este tan famoso órgano, es tambien el principal afectado por los avatares del amor. Se convierte entonces en el receptor de toda la sensibilidad padecida en los variables estados que el amor puede llegar a generar.
Puedo entonces vislumbrar, un tanto de confusión. Esta proviene de la idea de que el corazón puede representar lo mejor del amor, las nobles virtudes, pero tambien en no menos ocasiones, representa toda la zozobra anímica de aquel que ama, o por lo menos que cree amar. Y asi me vuelvo a preguntar, el corazón no puede ser tan fiable como al principio de mi escrito pareciera apuntar. ¿Cuál es el verdadero rostro del Corazon? Mi psicoanalista interior empieza escrutar todos aquellos datos que hablan de confrontada dualidad e intuitivamente responde; El Corazon debiera considerarse la sede de los sentimientos y aspiraciones del ser humano…en ultima instancia el corazón es fuente de amor y sabiduría, al proporcionar el temple necesario para comprender la experiencia vital. Y poco o nada tiene que ver con las emociones y los fluctuantes y violentos estados anímicos que le atribuimos con demasiada frecuencia. Nothing the Nothing con las reacciones emocionales que convulsionan su firme e incansable latir.

Si asumo la veracidad de esta afirmacion, como una condición basica. Y no porque trate de pregonar la infalibilidad de mi psicoanalista interno, ni mucho menos, sino porque resulta una premisa tan valida como otra cualquiera, tan necesaria para hacer ciencia. Ademas, cualquiera puede alcanzar a percibirla, ya que se infiere de numerosos textos; cuentos, novelas, ensayos filosóficos, psicológicos y espirituales.
Huy! De pronto, que valioso me resulta esto, para poder clarificarme personalmente, y tambien para no seguir sumando confusión al mundo. Mas acertado, seria entonces decir que a menudo el corazón es la victima de los deseos, los impulsos e instintos que nos mueven a buscar el contacto y la experiencia.
Y considero esta diferenciación un importante logro, ya que nuestro corazón bien se lo merece, despues de tantas equivocadas atribuciones y ambigüedades.
Si, cuando alguien… se enfada porque su marido se acomoda demasiado… cuando uno no se siente correspondido ni con su pareja ni con su hijo… cuando estas deprimida y no sabes… cuando la chica que deseas te da calabazas… cuando das demasiado y lo haces todo por ellos, y sin embargo, no dejas de sufrir… cuando te aceleras porque crees que algo malo va a ocurrirte… cuando quieres hacer el amor… o si permites que te dañen una y otra vez…. Lo siento, pero no. No has llegado a tu dorado Corazon, donde el Espiritu y la Materia se unen para dar lugar al Amor…



Hoy esta voz interna mia, tiene un puntito mistico y elevadizo. Pero, y si fuese asi. Y me pregunto por un momento… como seria el Corazón iluminado por el Amor. Quien lo sabe? Quien lo ha vivido alguna vez, entenderá a que me refiero. Y si es un estado de conciencia diferente. Según sea hay quien lo califica de “alterado” o tambien “amplificado”, en mi opinión ambos son utiles, y depende.
Entonces todas las situaciones emocionales podrian ser algo asi como; anuncios televisivos de una aspiración distorsionada, de una tendencia o de un brillo un tanto difuso de un profundidad que falta, que se desea llegar a ser. O si lo prefieres, bloqueos y trampas en la escalada hacia el Monte Sagrado del Corazon.

Ahora, estoy en diposicion de alcanzar una primera conclusión, donde las emociones no son lo mismo que los sentimientos, y no solo eso, sino que pueden alejarse notablemente y estar enfrentados. Es facil y frecuente encontrar ese conflicto en el mundo emocional, entre sentimientos y emociones.
Llegados a este punto, puedo afirmar con cierta solidez que una persona fundamentalmente emotiva, no es una persona de corazón, de la misma manera que un estricto intelectual tampoco lo es. Para muchos lo complicado sea que en un mismo espacio interno convivan, y no precisamente en armonia, todas esas entidades de las que estamos hechos; el odio, la rabia, los deseos, la tristeza, la aspiracion, las creencias a cerca de lo que soy y de lo que no soy, el amor.... (a veces en conflicto hebreo-palestino)
Ocurre algo similar con el amor, llamamos amor a un monton de cosas, que con cierta probabilidad no lo son. Con el amor es curioso observar con que facilidad este es, sin mas, un estado de necesidad, algo directamente relacionado con la emocionalidad y sus reacciones, y por tanto, con las experiencias tempranas de simbiosis.
Algunos es posible que me lean mal, no importa. Lo que quiero decir es que, lo que habitualmente llamamos amor es tan solo un querer. Es curioso, pero un ejemplo de este conflicto inconsciente, esta en el mismo uso de la palabra querer. Porque para amar, decimos "te quiero", cuando si amamos, deberiamos decirlo de otro modo. Querer, es sinónimo de desear, de apetecer o tratar de obtener como dice su raíz latina. Dicho simplemente, querer es un intento de posesión. Respiro hondo y digo, no pasa nada, todo esto es completamente normal, no estoy enjuiciando una cosa como buena y otra como mala. Sencillamente estoy poniendo consciencia, luz, al clarificar la confusión y reconocer donde me encuentro hoy, si en la necesidad o en el Amor, y cual es el recorrido que hecho para llegar hasta aqui.

Podria comprender, lo que el Corazon simboliza como lugar de encuentro, donde la mente y las sensaciones con sus emociones, crean algo completamente nuevo que son los sentimientos, y que apuntan a la manifiestacion de la naturaleza del Amor. Esta inscrito, en la analogía de la unión entre el Cielo y la Tierra, o en la trinidad de la deidad en Padre y Madre para dar lugar al Hijo. Es el resultado de la fusion del fuego de arriba con el fuego de abajo como llaman los esoteristas. Asi la llama de vida se establece en el corazón y con ella, el Amor. En la psicologia oriental, tenemos el cuarto chackra, con su cualidad de Amor impersonal, o de energia Cristica. Es tambien el camino medio. Para la psicologia transpersonal supone la reivindicacion del alma para la plena curacion.

Añado de paso, que esto no es mero romanticismo, son apuntes de planos internos que señalan hechos subjetivos, vividos en diferentes grados e intensidades. Energeticamente, el amor tiene su descripcion, y no, no es una emoción, y si, apunta a la participacion de cierto tipo sentimientos de orden diferente a las emociones que lleva en su transformacion la huella del pensamiento inclusivo y la voluntad espiritual. Esto es Corazon.

De este modo me voy quedando con, Corazon y Amor. El Amor como el camino del Corazon. Lo que debe entenderse como un proceso vital, un recorrido hacia el centro de nosotros mismos donde se conecta, lo de arriba y lo de abajo, creando una nueva unidad. Como camino, se pueden reconocer etapas, ciclos, logros y culminaciones. O si se prefiere, el transito de pequeños a grandes amores, de movimientos de descenso y ascenso, de lo mas inconsciente a lo consciente vividos con felicidad y realización variable.

Me preguntan si esta es una formula para la felicidad, la del camino de Corazon. Y contesto. ¿Puede? Tal vez si o tal vez no. Esto me recuerda a Groucho Marx, cuando decia “El dinero no compra la felicidad, pero la felicidad tampoco compra el dinero”

Fraternalmente.